Me gusta que te doblegues
porque yo ya intuía
que de lo que
presumías
es de lo que no
eres.
A una guerrera
curtida por la vida
no puedes declararle
combate
porque yo tengo las
armas y la experiencia
y tú, debido a eso,
no irás a ninguna
parte.
No me importan los
resultados,
me gusta la lógica
matemática:
siempre te da la
solución,
así que de una
manera diplomática:
esta es tu
situación.
Obedecerás sin
resistencia
a mis deseos
y en mi presencia
no te permitiré ni
un titubeo.
Soy mujer de
paciencia
porque sé que tu
condición requiere entreno
eso sí, sin
clemencia
porque soy hermana
del trueno.
Si te portas bien
tendrás premio
estar por y para mí,
y convertirte en mi único siervo.
porque yo ya intuía
que de lo que
presumías
es de lo que no
eres.
A una guerrera
curtida por la vida
no puedes declararle
combate
porque yo tengo las
armas y la experiencia
y tú, debido a eso,
no irás a ninguna
parte.
No me importan los
resultados,
me gusta la lógica
matemática:
siempre te da la
solución,
así que de una
manera diplomática:
esta es tu
situación.
Obedecerás sin
resistencia
a mis deseos
y en mi presencia
no te permitiré ni
un titubeo.
Soy mujer de
paciencia
porque sé que tu
condición requiere entreno
eso sí, sin
clemencia
porque soy hermana
del trueno.
Si te portas bien
tendrás premio
estar por y para mí,
y convertirte en mi único siervo.
Muchas gracias por tu tiempo.
O no, quizás hiciste lo que debías...
Foto: Pixabay.

